En muchas ocasiones conviene saber que es posible determinar quién es el autor material de una falsificación. Las individualidades gráficas y gestos tipo que todas las personas tenemos en nuestra firma y escritura, no sólo se trasladan en una falsificación por copia, sino que existen otros elementos de cotejo que, con independencia del análisis del recorrido y forma de una firma, se analizan igualmente y ofrecen una información técnica determinante para la atribución de una falsificación.
En este caso, pudimos demostrar la autoría de una misma persona en una falsificación múltiple llevada a cabo durante casi dos años.
Además de la identificación de una firma falsa, es posible conocer al autor/a material de la falsificación. Para ello es necesaria la práctica de unos cuerpos de escritura específicos realizados por la persona/s sospechosa/s. En este caso, dos de las firmas falsificadas presentaron varias individualidades gráficas que no tenían las firmas auténticas y sí estaban presentes en todas las firmas de uno de los sospechosos.
La carga de inconsciente que tiene el acto de escribir y firmar, no puede disimularse en cuerpos de escritura específicos en los que se valoran no sólo la firma, sino los reflejos gráficos condicionados.